“Al proponer una idea que reforme o adicione a nuestra Constitución, lo que debe imperar no debe ser la velocidad, sino la exhaustividad del debate parlamentario”, declaró el coordinador del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano (GPMC), Francisco Sánchez Villegas, al presentar una iniciativa para prohibir el “fast track” en los procesos legislativos del Congreso de la Unión.
“Donde la velocidad no es sinónimo de eficacia, es cuando se trata de debatir, reformar, crear o derogar a nivel constitucional. De manera contraintuitiva, la velocidad es enemiga de la exhaustividad reflexiva que cimenta el alfa y el omega de la praxis parlamentaria”, expuso.
La iniciativa busca establecer que cuando se reforme la Constitución Federal, entre la votación de cada una de las cámaras, Senado y de Diputados exista por lo menos un plazo de 4 meses, y de al menos 2 meses entre las aprobaciones en el Congreso de la Unión, y las legislaturas de los estados.
En total, significaría un periodo de 6 meses entre que se aprueba una iniciativa de reforma y su condición legal para publicarse, con el objetivo de permitir el correcto debate y argumentación, necesarias para “un acto de esta naturaleza”, detalló.
El líder del GPMC en el Congreso local, remarcó que esto es una práctica empleada en parlamentos alrededor del mundo, como el de Italia, que define a un tiempo mínimo de 3 meses para la votación de sus cámaras, y ha resultado “efectivo” para “blindar su Constitución ante pretensiones absolutistas”.
Comentó que en la actual Legislatura del Congreso de la Unión, han imperado las aprobaciones a vapor, con menos de 1 semana entre lo que son “presentadas, votadas y ratificadas, sin ninguna deliberación”, las reformas impulsadas por “el régimen”.
“La sabiduría que otorga siempre la mesura y la reflexión y un tiempo razonado, sean la medición semiótica de este paradigma legislativo que propongo. Es por eso que busco establecer que toda adición o reforma a nuestra Carta Magna, tenga un intervalo de tiempo razonable, para que se puedan hacer reformas, y no quedar al ‘contentillo’ de una fuerza política, y realizarlo de manera fast track”, apuntó.