Luego del hallazgo de un sitio de exterminio y adiestramiento en Reynosa, Tamaulipas, revelado por el colectivo Amor por los Desaparecidos, y otro más en Teuchitlán, Jalisco, en el rancho Izaguirre, el fiscal general del Estado, César Jáuregui Moreno, negó que en Chihuahua existan campos de exterminio en Chihuahua.
Sin embargo, hizo énfasis a los cementerios clandestinos, detectados en Casas Grandes y Ascensión, argumentando que son áreas donde los criminales dejan los cuerpos ultimados de sus rivales.
El caso más reciente es el de la comunidad “El Willi”, en Casas Grandes. Donde se localizaron más de 80 cuerpos.