Un grupo de docentes inconformes con los cambios que se pretenden hacer en el área de educación indígena, arribaron a Palacio de Gobierno, para solicitar sean tomados en cuenta en las decisiones en dicha área.
Los inconformes llegaron para pedir continúe a cargo Lucia Olivas Espino, quien es docente rarámuri, quien cuenta con una maestría y doctorado, además de haber sido titular de Conafe.
“Somos los dueños de Chihuahua y la gobernadora (Maru Campos) tiene que saber que en la educación indígena queremos a alguien que esté preparada con doctorado como lo está ella (Lucia) para que defienda a los docentes indígenas y trabaje a la par con maestros mestizos”, dijo Rosalba Loya García, docente inconforme.
Asimismo, hicieron mención que pretenden colocar en la dirección de educación indígena a alguien que no entiende la cultura, que no habla el dialecto y que debido a esto es que la educación indígena no avanza.